miércoles, 24 de agosto de 2016

8. LISKER


LISKER (1979)

1. Kalean festa
2. Amets jazarriak
3. Bakardade tristea
4. Garajeko melodia
5. Eldarniotik iheska 


Tras la muerte del dictador Franco, un montón de conjuntos vascos se subieron a los escenarios con ganas de recobrar la ansiada libertad expresiva. Entre 1975 y 1980, antes que el tsunami punk arrasara con todo, el folk progresivo y el rock sinfónico fue la vanguardia sonora de la escena musical del País Vasco. Curiosamente, el hecho de apostar por cantar en euskera, una lengua minorizada, es lo que ha posibilitado que bandas como Sakre, Koska, Lisker, Haizea, Itziar, Izukaitz o Enbor, no hayan caído el olvido como el legado de muchos conjuntos sinfonicos estatales de aquella agitada época.


Junto a bandas como Koska, Errobi, Itoiz, Sakre, Itziar, Magdalena o Haizea, LISKER son indispensables para entender la increible escena de rock folk progresivo surgida en País Vasco en los años 70. Sus influencias musicales eran muy amplias, iban desde Eric Clapton, Jimmy Hendrix, Soft Machine, King Crimson, Crosby Still Nash & Young, América, Bob Dylan, Leed Zeppelín, hasta Mikel Laboa, Xavier Lete o Benito Lertxundi. Lisker se formó a partir de dos grupos de Eibar (Gipuzkoa, Europa) con concepciones musicales muy diferentes. Por un lado, Ernesto Gómez (guitarra y voz) y Javier Zabala (bajo) provenian de JEIKI, un grupo vasco de folk intimista. Por otro lado, Julián Alberdi (guitarra) y José Salado (batería) provenian de ZIMA, un grupo de adolescentes aficionados al rock garaje y progresivo.

En 1979, Lisker ganaron un concurso en Basauri (Bizkaia, Europa) y, con el premio, grabaron su primer y único disco, "Lisker". Cinco temazos de folk progresivo y hard rock donde se alternan temas predominantemente acústicos con otros más eléctricos y enérgicos. El primero de esos temas es "Kalean festa" (Fiesta en la calle), con un riff que se va elevando poco a poco. Luego llegan "Amets jazarriak" (Sueños impuestos) o "Bakardade tristea" (Triste soledad), otro grandioso tema con melancólicos sonidos de flauta. "Garajeko melodia" (Melodía de garaje) comienza con distorsión y, luego, entrega riffs muy movidos, con la guitarra y la flauta turnándose.

Aunque al principio Lisker conjugaron folk y rock con raíces y textos en euskera (lengua vasca), luego evolucionaron hacia el jazz fusión. Como muchos grupos de su época, la obligacion de cumplir con el servicio militar les trastoco bastante su carrera musical. En 1983, tras varios cambios en la formación y, ante la feroz irrupción del punk en Euskadi, los miembros de Lisker se reciclaron al mundo de las verbenas. Dejaron de dar conciertos y apostaron por otro modo de vida, tan digno como divertido. Desde entonces el núcleo de Lisker se mantenido unido. "Estos 30 años de carrera musical, tocando de fiestas en fiesta, han sido toda una experiencia vital. Hay alegrías, buenos momentos y momentos no tan buenos. Pero, en general, el resultado es positivo".


DISCOGRAFIA

1979. "Lisker"

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